Asociación Nacional de la Salud Sexual y Discapacidad (ANSSYD)
Las personas con discapacidad tienen las mismas necesidades afectivo-sexuales que el resto de la población y tiene los mismos derechos que cualquier otra persona. No solo es que tienen necesidades sexuales sino que tienen derecho a poder desarrollar su sexualidad plena y saludablemente desde la libertad y con dignidad. La sociedad y las administraciones tienen la obligación de velar porque estos derechos se cumplan.
Al ser seres humanos, todos y todas somos seres sexuados. Tener una diversidad funcional, tanto física como cognitiva, no significa que no se tenga una sexualidad activa. Ésta se irá manifestando de diferentes maneras según la edad que se tenga. Puede que la necesidad de atracción, o el deseo de compartir con otro u otra aparezca más tarde que lo preestablecido, o lo esperado, pero tarde o temprano aparece, y hay que respetarla. Esther Sánchez Raja y Maria Honrubia Pérez son la Presidenta y la Vicepresidenta de ANSSYD, una sociedad de sexualidad y discapacidad. Las personas con discapacidad se enfrentan a un problema importante al intentar expresar lo que les pasa, por esa razón nace esta sociedad, por las carencias con las que se encuentra ante estas situaciones. Es una asociación sin ánimos de lucro, la cual lucha por la defensa de los derechos sexuales y reproductivos de las personas con diversidad funcional. Otros de los objetivos es formar e informar tanto a las personas que lo padecen como a los familiares o cuidadores no profesionales que los y las atienden. Se busca generar divulgación científica, por lo que se trabaja con evidencia científica.
El proyecto educativo contiene diferentes programas. Uno está dirigido particularmente a las personas con discapacidad para prevenir maltratos y abusos sexuales, los cuales se dan mucho en estos colectivos. Otro de los programas es para familiares o cuidadores, para que entiendan que todas las personas tienen sexualidad y que hay que dignificarla. El otro programa va dirigido a los profesionales ya que muchos no están formados en este tipo de temas. A su vez se realizan campañas de difusión, charlas, cursos, talleres, conferencias, para promover la educación y la información.
Las personas discapacitadas mantienen relaciones sexuales al igual que cualquier otra persona. Puede que no puedan llevar a cabo una relación sexual genital pero sí pueden entrar en contacto con otra persona, con caricias, con besos, con diferentes estímulos que los y las lleva a tener el mismo placer que con una relación coital. Por lo tanto, no significa que si no hay erección y lubricación vaginal no hay sexualidad, o no hay disfrute. El modelo biográfico profesional tiene en cuenta que la sexualidad no es solamente la genital, sino que tenemos terminaciones nerviosas en todo nuestro cuerpo que pueden hacernos sentir muy bien, sin la necesidad de una penetración. La actividad sexual debería ser algo lúdico, de mucha satisfacción, un proceso de crecimiento, pero en estos momentos está en un lugar muy reduccionista dejando de lado la riqueza que conlleva toda sexualidad.
ASOCIACIÓN NACIONAL DE SALUD SEXUAL Y DISCAPACIDAD (ANSSYD)
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Esther Sánchez Raja - Presidenta
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Maria Honrubia Pérez - Vicepresidenta
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