La pérdida de sensación en la piel es una manifestación física común del entumecimiento y la desconexión que se experimenta en el trauma.
A continuación un ejercicio para empezar a recuperar la sensación.
Cada día, durante aproximadamente 10 minutos, toma una ducha a presión del siguiente modo:
- Expón todo tu cuerpo bajo el chorro de agua fresca o tibia…
- Dirige toda tu conciencia a la región del cuerpo en la que se concentra la estimulación rítmica del agua…
- Deja que tu conciencia se desplace por cada parte de tu cuerpo a medida que te mueves bajo la ducha. Pon el dorso de las manos bajo el cabezal de la ducha; después las palmas y las muñecas, y a continuación ambos lados de tu cara, de tus hombros de tus axilas…
- Asegúrate de incluir todas las partes de tu cuerpo: cabeza, frente, cuello, pecho, espalda, piernas, pelvis, caderas, muslos, tobillos y pies.
- Presta atención a las sensaciones que te produce en cada zona, incluso si no sientes nada especial, o si sientes hormigueo, o algún dolor. Mientras sigues este recorrido di: “esta es mi cabeza, mi cuello… mis manos, etc… Os doy la bienvenida”.
- Otro despertar similar consiste en darse suaves palmadas energéticas en las diferentes partes del cuerpo, si se practica regularmente, esto también ayudará a restablecer la sensación de un cuerpo que tiene sensibilidad en la piel.